Hay situaciones en las que imaginarse la presencia de una botella de vino es fácil, unas chuletitas de cordero, unos quesos, pero un vino puede acompañar muchos ejemplos gastronómicos. Hoy nos atrevemos con una ensalada. Y no olvidemos que además de beber entre lechuga y tomate, también podemos disfrutar del vino mientras vamos preparando el plato, algo que a mí, me encata.
Louro Do Bolo Godello 2008
Valdeorras es una región del sureste de Galicia donde el clima se mantiene atlántico, pero ya comienza el interior. Allí han sido cultivadas vides de godello (92%) y treixadura (8%). Probad una botella de godello, tal vez menos conocida que el verdejo o el albariño, pero igual de interesante. El vino que probamos ha pasado por 5 meses en barrica de roble francés. La botella fue adquirida en Vinoteca Voramar por 12,30 euros. Alcohol 13,5 volúmenes. Servir frío, a 8 grados.
En copa tiene color amarillo pajizo brillante. Buena capa para un blanco. Ribete verdoso.
En nariz es moderado y complejo. Notas a piña, mineral y anís. Algo de frutas blancas.
En boca es fresco y largo. Se nota la barrica, pero muy bien integrada, parece parte de la propia uva. Aparecen notas de cítricos y algo herbáceo. Equilibrado y postgusto medio.
Mania 2008
Con la denominación de origen Rueda, probamos una botella monovarietal de verdejo, de la bodega Felix Lorenzo Cachazo. Adquirido también en la Vinoteca Voramar por 7,5 euros. Sin barrica, alcohol 13%.
En copa presenta color amarillo pálido y brillante.
En nariz es fácil de reconocer los aromas herbáceos, bastante plano. Fruta sutilmente expresada.
En boca aparece la manzana, toques ácidos agradables. Postgusto moderadamente amargo.
Auzells 2008
Tomàs Cusiné hace desde Costers de Segre una apuesta muy personal. La botella que probamos ensambla, atención: 32% macabeu, 19% sauvignon blanc, 16% parellada, 10% viognier, 8% chardonnay, 8% müller turgau, 3% muscat, 2% riesling, 1% albariño y 1% rousane. Más tarde pasa casi anecdóticamente por barrica, siendo la mayoría de la crianza en depósitos. Una gran complejidad, con un buen resultado final. La botella fue adquirida por 11,15 euros en Vinoteca Voramar, alcohol 12 %.
En la copa presenta un color pajizo fuerte, casi dorado.
Cuando acercamos la nariz, despliega aromas de plátano, algo de piña. Algo láctico. Posee también, más escondidas notas minerales. Muy complejo.
En la boca es agradable desde el principio, algo de aguja cuando entra en la boca. Después evoluciona a fruta blanca, siendo goloso. Acaba mucho más balsámico, hierbas del campo y regaliz. Postgusto largo y equilibrado.
Opinión
Acompañar una ensalada con un vino resulta más difícil de lo que esperábamos. Ciertamente un vino blanco ligero puede ser una muy buena opción, pero parece que maridar los aromas es otro tema. Tal vez pudiéramos haber explorado un gewürztraminer, un chardonnay muy ligerito, dependiendo de la ensalada ...
En cuanto a los tres que hemos probado, el que más nos ha gustado ha sido el Auzells, muy aromático y sobretodo muy equilibrado. Sugerimos este vino para acompañar una fresca ensalada !!
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Comentaris del missatge
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Inspirador, com sempre !
ResponEliminaGràcies burbujita !