Trying to look good limits my life

Todo lo que sé, lo que he aprendido - demasiado tarde - de Stefan Sagmeister, que me guía en la difícil práctica diaria de vestirme, arreglarme el pelo y hacerme presentable al mundo.

Sagmeister, un austriaco, nacido en 1962 es un diseñador gráfico muy respetado quién estudió y ahora opera en Estados Unidos. Tras varios éxitos en campo de la publicidad y la música (incluyendo un Grammy como director artístico al mejor diseño de embalaje del disco de Once in a lifetime de los Talking Heads), se toma un año sabático y se dedica a proyectos sin tener clientes. Así que en 2004 empieza su obra 20 things in my life I have learned so far, una serie de piezas tipográficas inspirada en la sabiduría de su abuelo.


No fue hasta 2008 que me encontré con la obra Trying to look good limits my life y desde entonces las imágenes arrancadas de una revista, ahora ya descoloridas, todavía están conmigo, en una bolsa de plástico arrinconada y el significado se ha quedado como huella indeleble en mi mente.
Tal vez el austro-neoyorquino no pensaba solo en el aspecto exterior, sino también en parecer bueno, en ser una buena persona. En definitiva, comportarse siempre de forma correcta y adecuada por el bien de las apariencias, es un lastre en la vida.
Llevada al extremo la frase no me afecta, porque yo no comparto plenamente esta visión. Sin embargo, este lema se ha convertido en mi linterna de Diógenes: no quiero que la apariencia, el exterior, poner cuidado en mi aspecto, pongan vallas, barreras, obstáculos que limiten mi vida.


Entonces miro al mundo de la moda, la excelsa apariencia, con una visión doble.
Por un lado apreciándolo, y por eso lo busco y lo analizo, no me canso de observar y conocer, al igual que otras formas de creatividad que llenan mi vida: la música, el cine, la escritura. Pienso también en la Bienal de arte de Venecia: te gusta, te diviertes, descubres cosas que no sabías, pero ¿quién querría tener en casa una obra realizada con palitos de regaliz?

Por otro lado, cuando tengo que aplicar a mí misma lo que la oferta de moda y los gustos correctos proponen, más a menudo me quedo pensando: ¿trying to look good limits my life? Y así las elecciones prácticas terminan siendo impulsadas por el deseo de no poner límites a sentirme bien sin pensar en la apariencia. Por la sensación de que el cuidado de sí mismos y el aspecto exterior significa quitar tiempo y añadir fatiga a los días ya de por sí llenos de elecciones y compromisos.


Así, después del mes de la moda, que comenzó el 8 de septiembre, pensé en mirar las pasarelas y eventos, como si se pudieran juzgar con la sabiduría de los abuelos.

Pensé que fuera fácil de decir:
Bonito, pero solo para delgadas.
Hermoso, pero sólo para los jóvenes.
Agradable, pero sólo para las locas.
Hermoso, pero no se puede llevar porque es incómodo;
agradable, pero no se puede llevar por improbable...
Feo.
Fiempre lo mismo;
qué aburrimiento…

Con mis ideas preconcebidas, he leído páginas web de USA, el Vogue británico, francés e italiano. He leído comentarios, observado detalles, visto desfiles. Entre las tendencia reportadas por Vogue UK, la mejor página web entre las de la revista Vogue en todo el mundo, quería mencionar estas cuatro:

(1) THE GOOD NEWS: There’s room – from Marc Jacobs in New York to Prada in Milan and just about everywhere in Paris – there were tunics over skirts that mean we’ll breathe easy next summer.
Una buena noticia: vamos a estar cómodas, nada nos va a apretar o dificultar la respiración.

(2) THE EASY WIN: If you don’t buy anything next summer, just add an animal. Prada’s monkeys, of course, Louis Vuitton’s zebras, tigers, pandas or giraffes or just make like Hermes and ride off into the sunset on a glossy stead.
Elección fácil y ganadora: ¿no quieres comprar nada nuevo? Añade algo animal.

(3) THE RACE TO BUY FIRST: Miuccia does it again – the Prada banana earrings or the Miu Miu neon heels.
Sé más rápido que los demás: ¿quieres comprar algo absolutamente nuevo? Elige Miuccia, sean los aretes que parecen plátanos de Prada o los zapatos de tacón flou de Miu Miu.

(4) THE BEST YET: Easy – Prada. How to change the course of fashion in the space of 10 minutes. Again.
¿Lo mejor del mundo? Una y otra vez, Prada.

El próximo verano puede que sea poco limitante y se podrá llevar de todo: hay frutas, las rayas de colores, animales, blanco total y negro total, colores pastel y colores flou. Ya no hay el carne y el beige del 2010, y el esmalte 505 particulière de Chanel ha dado paso a un esmalte de color gris oscuro, muy agradable, que todavía no se sabe cómo se llama, ya que acaba de ser lanzado. Encontramos longitudes sensatas y cortes cómodos, bolsos pequeños y grandes, pero con detalles que los hacen fácil de sujetar, zapatos con tacones altos, medio (el tacón desaparecido desde hace tiempo) o bajo (sí, también desfilaron zapatos planos), menos súper tacones, pero los que todavía quedan, se pueden llevar sin dificultades


Al final, sin embargo, me hice una pregunta. Franca Sozzani, por ejemplo, ha mantenido un diario durante un mes con fotos y textos en los distintos front row. Lo que emerge es un apoyo general al sistema de la moda, una palabra amable para todo el mundo (no se pronuncia abiertamente a favor de alguien, y mucho menos en contra) y para ella, más cambios de ropa que en una actuación de Brachetti.
Participar en tantos desfiles y eventos, a pesar de ser apasionada y fascinada, y estar vestida, maquillada, llevando siempre joyas con el fin de dejar clara la razón por la cual te consideran - con razón - una de las tres más poderosas y influyentes mujeres en el mundo de la moda sería, ¿divertido, interesante o estresante y limitante?


Personalmente, tener que elegir entre dedicar más tiempo y dinero para estar good looking; aún hoy en día salgo sin maquillarme y en sudadera. En los pies, ocultado por un calcetín gris oscuro como los pantalones y unas zapatillas para correr con cordones flou, el esmalte correcto..
Sé que en unos meses estará fuera de moda. Pero voy a planteármelo en el próximo verano.
Mientras tanto, me fijo en el arete-banano de Miuccia. Y me gusta, me lo compraría de inmediato. Como el pendiente en forma de maquina para el café moka que llevaba Candela (María Barranco), en Mujeres al borde de un ataque de nervios en 1988 que todavía tengo.
¿Debería considerarlo un límite en mi vida? No, pero tampoco un intento de tener un mejor aspecto.

Marinda
Artículo original de L'Undici.

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