Botellón

Como contrapunto a tanta tradición navideña nos proponen algo tan original como sushi. Desde aquí sugerimos un vino, un cava y ... ¡¡¡ una cerveza !!!

Mas Candí Quatre Xarel.los 2006

Son jóvenes y trabajan en la D.O. Penedès, los responsables de Mas Candí, una bodega que comercializa esta botella y tiene un tinto y un cava como promesas. La elaboración de este vino 100 % xarel.lo tiene su particularidad, ya que ha sido envejecido 8 meses en barricas de castaño, acacia y robles francés y americano. Alcohol 13 %, precio 14.5 euros.
En copa tiene un color dorado bastante mate, no tiene brillos excesivos algo oscuro.
En nariz es fuertemente mineral, huele a humo, ceniza y piedras.
En boca sorprende el cuerpo, pero con una acidez muy conseguida. Mantiene los aromas minerales y los desarrolla. Es fresco y estructurado a la vez, tiene aromas de lima, limón verde, flores blancas, ácidas pero perfumadas. El postgusto es muy fino, unos taninos muy finos, muy bien acabados, redondos. Y prolongado. Queda un exótico recuerdo a mandarina.

Colet A Priori Cava Brut

Con la intención de diversificar la oferta catalana de cavas, Josep Colet i Orga y su empresa familiar tuvieron que pasar de la D.O. Cava a la D.O. Penedès para poder realizar este cava que ensambla 50 % de macabeo, 30 % de chardonnay, 10 % de riesling, 7 % de gewurztraminer y 3 % de muscat. Probamos una botella degollada este mayo, tras 18 meses de rima, con 11.5 % de alcohol, precio 6.95 euros.
Es de tonalidad clara más que pajiza, ya en copa apreciamos una burbuja muy fina.
En boca es complejo, claramente marcado por la fuerte aguja. Es seco y un pelín alcohólico. Desarrolla aromas a hierba seca y mantequilla. No despliega excesivamente las notas frutales. Postgusto franco.

Cantillon Lou Pepe Framboise 2005

Esta curiosa cerveza belga tiene una elaboración ciertamente complicada. Primero de todo, es de fermentación espontánea, es decir, que ningún hongo ni levadura es añadido, son los microorganismos autóctonos del ambiente los responsables de la fermentación. Además sólo se consigue en una pequeña región de Bélgica dónde las condiciones son propicias. Se realizan con 70 % de malta y 30 % de trigo y, específicamente la que probamos, se le añadieron 300 gramos frambuesas naturales por cada litro de cerveza durante la segunda fermentación. Finalmente, antes del envejecimiento en botella, pasó 2 años en barricas de Bordeaux que fueron utilizadas para el envejecimiento de vino. Os podéis imaginar que cada botella es única, casi artesanal. Contiene 5 % de alcohol y pagamos 15 euros.
Tiene en copa un tono rojo granate muy turbio, poco espumosa.
Aromas fuertemente afrutados, principalmente frambuesa muy evolucionada, amarga, amaderada.
En boca es terriblemente ácida. Es imposible beberla de un trago, hay que hacerlo a sorbitos. Tiene poco cuerpo pero el aroma es muy complejo. Principalmente destaca el sabor ácido, pero también encontramos notas amargas de la madera mezcladas con toques de frambuesa muy particulares, algo lácticos.


Opinión

El mejor de los tres es sin duda, y con mucho, el Mas Candí. Está riquísimo, es un vino de gran calidad y marida bastante bien con el sushi. Recomendamos que lo probéis. El cava no está mal, tiene una buena relación calidad precio pero esperábamos algo más del acertado ensamblaje. En cuanto a la cerveza nos hemos equivocado de pleno, tiene una acidez excesiva y no representa un buen maridaje.



Burbujita Freixenet
criteri@elcrit.org

Share this: